domingo, 20 de mayo de 2012

Historias para cambiar el mundo (que hace falta)

INVITACIÓN PÚBLICA para participar el día 21 de junio: Desde la RIC, Red Internacional de Cuentacuentos, queremos hacerte llegar esta invitación para que te sumes a nuestra celebración: Historias para cambiar el mundo, este 21 de junio de 2012 y a partir de entonces, el 21 de junio de cada año.

En el último Simposio Internacional de Contadores de Historias, celebrado el año pasado en Río de Janeiro, Brasil, nos reunimos varios coordinadores de la RIC y acordamos por unanimidad, establecer esta fecha para celebrar el nacimiento de la RIC, y difundir y afianzar el arte de contar historias bajo el lema: Historias para cambiar el mundo. La propuesta es invitar y convocar a todas las personas que quieran sumarse a este festejo: Cuentacuentos, narradores espontáneos, bibliotecarios, docentes, padres, abuelos, jóvenes y todos aquellos que tengan interés en hacerlo, para que narren cuentos ese día en diferentes lugares: escuelas, bibliotecas, colegios, casas de familia, plazas, parques, centros culturales, salas teatrales.

Con estas acciones estaremos multiplicando el efecto de celebración que buscamos y estaremos –entre todos- narrando historias para crear una nueva realidad, y comenzar a sentir que estamos construyendo un mundo mejor a través de la palabra y de los cuentos.

Si cuentas cuentos el día 21 de junio, envíanos un e-mail a red@cuentacuentos.eu contándonos en qué lugar contarás cuentos y nosotros colgaremos la información en la web de Historias para cambiar el mundo y en el blog.

En el email debes indicar:
Nombre de la persona que va a contar lo cuentos.
Lugar donde se va a contar los cuentos: (nombre del lugar, calle, ciudad y país).
A qué hora.

También nos puedes enviar una fotografía del momento en el que estás contando cuentos ese día 21, o un enlace de youtube con tu intervención para colgarla en la web.
E-mail: red@cuentacuentos.eu

¡Muchas gracias por sumarte a esta propuesta!

Red Internacional de Cuentacuentos (RIC) :: International Storytelling Network

miércoles, 16 de mayo de 2012

Jairo Anibal Niño

Hoy mientras ponía las pruebas de diagnóstico de competencia lingüística me he llevado una gran sorpresa: el texto para comentar era un poema de Jairo Anibal Niño.
                                             Imagen de la red
Me trajo tantos recuerdos, las charlas con los narradores, aquellas conferencias tan llenas de ternura, su conversación (la escénica y la otra), sus cuentos reivindicativos, sus poemas de amor infantiles, sus minicuentos..., qué agradable sorpresa la de esta mañana compartir con Jairo Anibal una clase de 2º de la ESO, me huelo que no será la última. En algún lugar alguien tiene algunos libros que Jairo me regaló y dedicó y que de pasar de mano en mano se perdieron de vista. 

Pero en la memoria me queda su princesita, sus charlas con los aviones, su gota de tigre, la pregunta de aquel niño que no sabía qué le pasaba al corazón cuando se enamora (preguntada a un cirujano del corazón), sus avioncitos de papel, su versión del gato con botas... Muchas de sus palabras viven conmigo todavía, la tierna impresión de su conversación escénica aún persiste en mi corazón. Gracias Jairo por venir a visitarme de nuevo desde uno de tus poemas de amor para niños.

viernes, 11 de mayo de 2012

Protestas

Lo miremos por donde lo miremos, nos gusta quejarnos. Lo sabemos. Por eso cuando nos lo dicen lo asumimos. Pero claro. Claro. A mí me gusta quejarme, pero también habrá que reconocer que no veas la que nos está dando el capitalismo bestial últimamente. Poniendo sus gobiernos y dictando órdenes a diestro y siniestro. Si esto parece Rusia, lo digo por lo del capitalismo feroz. Aunque quizás tendríamos que decir China, también capitalismo feroz.

En fin, que mañana me voy a protestar. A decir que no me gustan las cosas que están pasando. A pedir que rectifiquen los que nos gobiernan. A apoyar un poquito la revolución con mi presencia indignada y con mi queja.

Yo siempre que digo que cuento cuentos para hacer la revolución. También cuando me preguntan digo que soy profesor para hacer la revolución. Porque pienso que hacer la revolución, hacer que las cosas cambien es más cosa de una actitud vital que de un día de protesta o de unos cuantos gritos en una manifestación. Pero a veces la manifestación es necesaria.

Por cierto, a la manifestación voy con mi niño de nueve años. Porque pienso que así lo educo también en hacer la revolución, si alguien me pregunta, también tener un niño es hacer la revolución. Quizás más la mágica que la política, pero desde luego la política también.

Bueno, no es una historia corta, como las que suelo poner por aquí, pero es una historia. Y desde luego tiene que ver es con una etiqueta de las que pongo mucho: "problemas con la realidad". La realidad no está bien, y pretendo ayudar a cambiarla.

Nos vemos en la manifestación del 12 M. Nos vemos en otras muchas protestas, nos vemos en las palabras, entre ojos y gargantas, nos vemos al calor de una buena idea para vivir mejor, compartir mejor y ser más felices. Nos vemos cambiando el mundo.


lunes, 30 de abril de 2012

Los Bestias y su idea de Belleza

No que estás aquí. Ni que nos encontramos a menudo furtivamente, lo sé. Pero puedo imaginármelo mientras no nos une la vida. Si ya sé que yo soy ese loco tímido y temblón con pocas trazas de haberse lavado en esta semana, y tú ni siquiera vives aquí. En la realidad digo, bueno, en mi realidad. Ya sé que tu vida de gran fama y conciertos por todo el mundo te mantiene ocupada, y que sólo me puedes regalar tu voz en diferido, y tu cuerpo en la pantalla plana del ordenador. 


No que estás aquí. No en realidad, pero estás, estás. Estás. Yo siento tu voz muy dentro, y me conformo con tu sonrisa para las fotos. 

 Imagen de la red


La verdad es que no quiero que estés conmigo. En la realidad digo. Digo en mi barrio, en mi ciudad. Si nos encontrásemos me ignorarías, o si llegases a reparar en mí te repugnaría verme. No me parezco nada a tus parejas. No soy guapo, ni fuerte, ni romántico, ni hablador, ni tengo una bonita sonrisa como la tuya. Tampoco me salvan mis ojos húmedos y miopes, ni mi escaso pelo grasiento. No, no quiero que te acerques a mi realidad, prefiero traerte a mi imaginación a través de la voz, a través de las fotos. Ahí sí me dices cosas, y yo las escucho, ahí sí nos abrazamos y los dos estamos limpios. Lo que yo quiero, lo que necesito en cada momento. Sólos. Tú dentro de mí y yo. No pido más. Así es como nos quiero y así es como nos tengo.